Investigadores de la UVa en Soria estudian cómo una especie de sabina favorece el desarrollo de otras plantas
Investigadores del Laboratorio de Botánica del Departamento de Ciencias Agroforestales de la Universidad de Valladolid, situado en el Campus de Soria, han realizado interesantes hallazgos sobre las interacciones que se producen entre plantas de las montañas mediterráneas. En concreto, han estudiado cómo la sabina rastrera (Juniperus sabina L.) favorece el desarrollo de otras plantas, una información de gran interés para trabajar en su conservación y enfrentar los efectos de los principales motores de cambio global: el cambio en los usos del suelo (el abandono de usos tradicionales agrarios extensivos –agricultura y ganadería–) y el cambio climático.
Según los investigadores, la alta montaña mediterránea atesora una gran biodiversidad de plantas pero su persistencia está seriamente amenazada. En relación con el cambio climático, un aumento de la temperatura y una disminución de las precipitaciones acrecentará el estrés climático que soportan estas plantas.
En este contexto, para favorecer su conservación es necesario comprender los mecanismos que configuran estos ecosistemas para poder predecir su dinámica futura. En esta línea trabaja desde hace cinco años una de las investigadoras del Laboratorio de la UVa, Ana García Cervigón, quien ha defendido recientemente su tesis doctoral en este materia bajo la dirección del profesor José Miguel Olano.
Como explica la investigadora, las interacciones entre plantas son una de las principales fuerzas que definen y controlan la estructura de las comunidades vegetales. Estas interacciones pueden ser positivas (conocidas como facilitación) o negativas (conocidas como competencia), y su signo depende del contexto ambiental. En ambientes duros, donde los recursos escasean, predominan las interacciones positivas y las plantas se favorecen mutuamente, mientras que en ambientes más benévolos y con mayor disponibilidad de recursos la competencia aumenta.
Las montañas mediterráneas son ambientes duros para las plantas desde un punto de vista climático, puesto que el frío del invierno y la sequía del verano limitan el período adecuado para el desarrollo vegetal y, por tanto, es esperable que las interacciones positivas entre plantas jueguen un papel importante en la estructuración de las comunidades y en el funcionamiento de las poblaciones y los individuos.
Es el caso de la sabina rastrera, una especie de las montañas mediterráneas que juega un papel muy importante en la organización de la vida vegetal en estos ecosistemas. “La sabina rastrera mejora las condiciones de humedad y nutrientes del suelo y de este modo favorece el desarrollo de otras plantas cuando éstas crecen bajo su copa, es decir, las facilita”, detalla García-Cervigón.
Aunque el papel de este arbusto como facilitador de otras plantas ya había sido demostrado en algunos estudios previos, la tesis aporta un enfoque novedoso: el dendrocronológico. “Al tratarse de una especie con anillos de crecimiento su análisis puede ser potencialmente incluido como complemento a los estudios ecológicos habituales (el análisis de las estructuras poblacionales de las especies facilitadas, el estudio de distintas variables relacionadas con el estado físico de las plantas o las relaciones espaciales entre individuos de distintas especies). Hasta el inicio de esta tesis no se había trabajado con los anillos de crecimiento de esta especie”, recuerda.
La dendrocronología permite así incluir una perspectiva temporal. “Las plantas forman un anillo en el tallo o tronco por cada año de vida y, como consecuencia, los anillos de crecimiento acumulan información de todos estos años. Contando todos los anillos podemos saber la edad exacta de una planta de forma inmediata y además podemos ver, por ejemplo, variaciones en su crecimiento en grosor de un año a otro que estarían relacionadas con las condiciones ambientales de cada año: en años mejores (más húmedos y menos calurosos en verano) los anillos serán más anchos, mientras que en años más duros (con una sequía estival intensa) los anillos serán mucho más estrechos”, precisa la experta.
El trabajo científico ha dado lugar a cinco artículos, tres de ellos publicados ya en revistas de impacto (el último este mismo mes de septiembre en la revista Oecologia) y otros dos en proceso de publicación.
Referencia bibliográfica: García-Cervigón, A. I., Linares, J.C., Aibar, P., Olano, J. M. (2015). “Facilitation promotes changes on leaf economics traits of a perennial forb”. Oecologia 179: 103-116.
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