Sensores para el monitoreo de la actividad trashumante de las ovejas merinas en León

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El uso de la tecnología se ha convertido en uno de los instrumentos clave para la mejora de las actividades en el medio rural y evaluación del medio que nos rodea. Por ello, Cesefor ha colocado 30 dispositivos con GPS y distintos sensores a 27 hembras y 3 machos de un rebaño de unas 1.000 ovejas merinas procedentes de Extremadura, que están realizando la trashumancia en los puertos de Las Pintas y Boiva en las localidades de Salamón y Lois, en la provincia de León.

Estos dispositivos tienen como objetivo el seguimiento y monitoreo de su actividad diaria. Además, con ellos se podrán analizar los “careos” (movimientos de ganado) en los puertos. Los dispositivos tomarán datos a tiempo real del manejo realizado al ganado (movimientos de perros y las órdenes del pastor), así como de las zonas de pasto por las que se mueven. Ofrecerán además datos de su ubicación, temperatura y actividad y comportamiento diario, avisando al pastor y al centro de gestión, si se produce alguna actividad anómala o si han salido de un recinto delimitado, todo esto en tiempo real desde junio de 2020 hasta octubre de 2021.

Esta acción se enmarca en el Grupo Operativo Ovinnova, que tiene como objetivo diseñar un modelo de negocio de prestación de servicios ganaderos para mejorar la competitividad del pastoreo trashumante y realizará durante los próximos meses distintas actividades innovadoras y de investigación para la mejora de la actividad y la conservación sostenible de hábitats de montaña.

El consorcio del proyecto, liderado por Fundación Monte Mediterráneo, lo conforma un grupo de entidades relacionadas con el sector de la ganadería extensiva y la producción de carne de ovino, entre las que se encuentran la Fundación Cesefor, la Cátedra de Ganadería Ecológica Ecovalia-Clemente Mata de la Universidad de Córdoba, la certificadora de producción ecológica CAAE y la organización interprofesional agroalimentaria del ovino y caprino INTEROVIC. Este consorcio, además, cuenta con entidades colaboradoras de primer nivel como la Junta de Castilla y León, EA Group, FEDEHESA, INDEHESA y el Ayuntamiento de Crémenes. Dos entidades más, la Universidad de León e Innogestiona Ambiental, apoyan las acciones del Grupo Operativo en calidad de asistencia técnica especializada al proyecto.

El proyecto está subvencionado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Unión Europea a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural.